Después de leer "Viaje al centro de la Tierra", los alumnos tienen opiniones de todo tipo. Algunos se han liado con tantas descripciones, a otros les ha resultado demasiado "fantástico" (éstos han olvidado que se trata de un libro de ciencia-ficción) y a otros les ha servido para conocer a este autor y sentir el "gusanillo" de leer algo más de él.
A continuación os dejo la opinión de una alumna sobre el libro:
"De todos es sabido que con la imaginación se puede llegar a cualquier parte. Incluso al núcleo del planeta (sí, ese que sigue al manto, y que todos hemos estudiado en Geología). Es a este ignoto lugar donde nos conduce Julio Verne en Viaje al centro de la Tierra, una de sus obras más conocidas, imprescindible en cualquier estantería que se precie.
Siguiendo las pistas de un alquimista del siglo XVI, el excéntrico profesor Otto Lidembrock y su sobrino, ingenioso narrador, emprenderán una aventura vertical que les conducirá a un inesperado mundo interior, donde es posible encontrar criaturas olvidadas en la superficie desde hace millones de años.
A pesar de que los protagonistas viven situaciones extremadamente difíciles, (AVISO: si no lo has leído, piensas hacerlo, y no quieres que te desvele el final, aunque sea imaginable, no sigas leyendo) acaban encontrando luz, todo su esfuerzo se ve recompensado; supongo que este es el mensaje que se puede desenterrar de esta historia, un canto a la esperanza y a la lucha por los ideales.
Pero ante todo, esta es una historia de aventuras llena de fantasía, a la que Verne sabe dar magistralmente una pincelada científica. Sus descripciones son tan palpables que hacen sentir la humedad de las rocas, el calor de la lava, o la angustia de encontrarse perdido a miles de leguas bajo el suelo. Precisamente por esto es posible sufrir algo de claustrofobia durante, en ocasiones, tan angustioso viaje.
Julio Verne fue el primero en inventar el helicóptero, el submarino o la nave espacial en sus novelas, aparatos inimaginables en su tiempo… Ante esto, cabe plantearse la cuestión: ¿será capaz el ser humano algún día de alcanzar el centro de la Tierra?"
Laura Cabeza. Alumna de 4º EC.
Fuente de la imagen: agapea
A continuación os dejo la opinión de una alumna sobre el libro:
"De todos es sabido que con la imaginación se puede llegar a cualquier parte. Incluso al núcleo del planeta (sí, ese que sigue al manto, y que todos hemos estudiado en Geología). Es a este ignoto lugar donde nos conduce Julio Verne en Viaje al centro de la Tierra, una de sus obras más conocidas, imprescindible en cualquier estantería que se precie.
Siguiendo las pistas de un alquimista del siglo XVI, el excéntrico profesor Otto Lidembrock y su sobrino, ingenioso narrador, emprenderán una aventura vertical que les conducirá a un inesperado mundo interior, donde es posible encontrar criaturas olvidadas en la superficie desde hace millones de años.
A pesar de que los protagonistas viven situaciones extremadamente difíciles, (AVISO: si no lo has leído, piensas hacerlo, y no quieres que te desvele el final, aunque sea imaginable, no sigas leyendo) acaban encontrando luz, todo su esfuerzo se ve recompensado; supongo que este es el mensaje que se puede desenterrar de esta historia, un canto a la esperanza y a la lucha por los ideales.
Pero ante todo, esta es una historia de aventuras llena de fantasía, a la que Verne sabe dar magistralmente una pincelada científica. Sus descripciones son tan palpables que hacen sentir la humedad de las rocas, el calor de la lava, o la angustia de encontrarse perdido a miles de leguas bajo el suelo. Precisamente por esto es posible sufrir algo de claustrofobia durante, en ocasiones, tan angustioso viaje.
Julio Verne fue el primero en inventar el helicóptero, el submarino o la nave espacial en sus novelas, aparatos inimaginables en su tiempo… Ante esto, cabe plantearse la cuestión: ¿será capaz el ser humano algún día de alcanzar el centro de la Tierra?"
Laura Cabeza. Alumna de 4º EC.
Fuente de la imagen: agapea
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